protección marca industria musical

La cantante Rosalía ha lanzado su nuevo álbum LUX, que sin lugar a dudas es más que un disco… es una obra maestra. Solamente el videoclip de la canción Berghain, es una experiencia visual y sonora. Ha sido descrito como una producción de alto nivel artístico, grabada entre Berlín y Barcelona, con componentes simbólicos y estéticos muy marcados.

LUX es una marca que combina música, imagen, registro de derechos y estrategia creativa.

¿Por qué nos importa desde el punto de vista del derecho de la propiedad intelectual?

Mucho antes que LUX saliera al mercado, el nombre ya aparecía en el registro de marcas de la EUIPO (EUTM 019198973). Lo que significa que la artista está blindando sus activos intangibles como título, imagen, vídeo, sonido.

En ese contexto, el registro de la marca “Lux” asociada al álbum no solo protege la denominación, sino que impide que terceros la usen para actividades similares.

Ahora bien, desde la perspectiva legal cada componente difusible (el álbum, el videoclip, la portada, los diseños exclusivos de la edición física) está sujeto a protección mediante derechos de autor, marca y posiblemente modelos de diseño industrial.

Es importante considerar, que el entorno digital actual exige una estrategia de protección global, la artista lanza en múltiples idiomas y con distribuciones físicas y digitales, por lo que el blindaje internacional de sus derechos se convierte en una prioridad absoluta.

Claves estratégicas para todo creador musical:

  1. Anticipación: Registrar como marca la denominación del artista o de la banda, álbum, logos, dibujos, diseños de portada y componentes visuales antes del lanzamiento evita que otros ocupen esa marca o confundan al público.
  2. Versión física vs digital: Si existen ediciones limitadas (vinilos, CD especiales) con contenido exclusivo, hay que reflejarlo en el contrato/licencia los derechos de explotación y los formatos protegidos.
  3. Colaboraciones y derechos compartidos: Cuando participan artistas invitados u orquestas (como la London Symphony Orchestra en este caso) es muy importante que los contratos definan claramente la titularidad de los derechos (composición, grabación, edición, distribución).
  4. Multiformato y multimedia: El videoclip, las plataformas de streaming, las redes sociales, dominios web, interfaz y los objetos de merchandising implican protecciones diferenciadas —una marca registrada no cubre automáticamente todos esos formatos.

Ya sea que trabajes en la industria musical, en producción audiovisual o en la creación de contenido cultural, es imperativo preguntarse “¿Has blindado hoy tus creaciones?” En Gálvez Monteagudo podemos ayudarte a registrar marcas, diseñar contratos de colaboración, proteger diseños y derechos audiovisuales. Juntos podemos diseñar una estrategia protección para tu obra.