Apostar por la educación privada en el Perú: una oportunidad concreta para inversores
El mercado educativo privado en el Perú presenta indicadores que confirman una tendencia clara: las familias y los estudiantes están destinando cada vez más recursos — y expectativas — hacia la educación de calidad. Para un empresario que visualiza abrir una nueva institución educativa, esto no es sólo una idea válida… es una oportunidad que exige actuar con rapidez y solidez legal.
Datos que avalan la oportunidad
- Una encuesta elaborada por una firma especializada reveló que en promedio los padres destinan alrededor de la cuarta parte de sus ingresos mensuales a la educación de sus hijos. En hogares de nivel socioeconómico medio-alto, este porcentaje puede estar entre 20% – 30%, y en niveles más bajos inclusive entre 30% – 40 %.
- Otro estudio señala que los hogares de mayor nivel socioeconómico en Lima llegan a gastar en educación privada alrededor de S/ 946 por mes, mientras que los hogares más pobres destinan alrededor de S/ 44 por mes: es decir, una diferencia de hasta 24 veces entre los extremos del mercado.
- En términos de matrícula en educación técnica y tecnológica privada, el crecimiento es notable: la matrícula en institutos pasó de 455 000 alumnos en 2018 a 550 000 en 2023, lo que representa un crecimiento de aproximadamente 21 %. De ese alza, se indica que el sector privado aumentó su matrícula cerca del 30 %.
- En lo que respecta al gasto público y privado en educación, el informe de la Organisation for Economic Co‑operation and Development (OCDE) “Education at a Glance 2025” señala que en el Perú la inversión total en educación (desde primaria hasta terciaria) representa alrededor del 4.2 % del PIB, lo que deja un margen de acción interesante para el sector privado.
- En infraestructura educativa, el Ministerio de Educación del Perú (MINEDU) apunta a que el presupuesto anual del sector puede llegar al 6 % del PIB, mediante el llamado “Pacto Social por la Educación”. Gobierno del Perú
- Por ejemplo, ya en el 2025 se reporta que hay 701 expedientes técnicos en evaluación, con construcción proyectada de 797 nuevas instituciones escolares, inversión estimada de S/ 7,683 millones, que atenderían a 144 094 estudiantes. Universidad de San Martín de Porres
Proyecciones y crecimiento futuro del sector
Aunque los datos específicos que diferencien únicamente al “sector educativo privado” son más limitados, los siguientes elementos construyen un escenario favorable:
- La inversión privada en el Perú muestra señales de dinamismo, estimándose un crecimiento de hasta 6 % en 2025, lo cual aporta al entorno de inversión educativo (infraestructura, equipamiento, servicios).
- La inversión en educación (público-privada) mediante mecanismos como “Obras por Impuestos” ha alcanzado S/ 2,166 millones para el sector educativo, lo que indica que el componente privado tiene participación en infraestructura educativa.
- La combinación de alta demanda, mayor disposición de gasto por parte de las familias, y la intención de ampliación de cobertura e infraestructura del sector público crea ventana de oportunidad para que instituciones privadas capitalicen.
- En concreto: si el presupuesto del sector educativo (y por tanto su demanda asociada) llega al 6 % del PIB (como apuntan las declaraciones del MINEDU) en los próximos años, se libera un espacio significativo para la participación privada.
¿Qué implican estos datos para usted como inversor o empresario educativo?
- Existe una clara voluntad de gasto por parte de los padres de familia hacia la educación privada y de calidad: lo que significa que la demanda está activa, y no sólo latente.
- El hecho de que el segmento privado aún tenga espacio de crecimiento — tanto en infraestructura como en servicios diferenciales (metodologías alternativas, tecnología, internacionalización, bilingüismo, etc.) — sugiere que un proyecto bien concebido puede capturar cuota de mercado y un mayor valor agregado.
- Que los hogares de menores ingresos también destinan porcentajes elevados de su presupuesto a educación significa que los modelos de negocio educativos pueden diseñarse tanto para nichos premium como para segmentos de servicios más asequibles.
- Sin embargo, también se observa que la calidad educativa en algunos casos no cumple con las expectativas: un estudio señaló que en ciertas materias la escuela pública supera a la privada por costos de pensión menores. Esto significa que no basta con abrir un colegio más: la reputación, la calidad percibida y la diferenciación se vuelven factores clave para atraer familias.
¿Por qué necesita asesoría legal especializada desde el inicio?
El mercado es prometedor, pero también competitivo y regulado. Los desafíos no son menores: permisos, infraestructura, normativas, inspecciones, calidad educativa, recursos humanos, contratos laborales, zonificación, etc. Un retraso o error puede costar meses de tramitación y pérdida de oportunidad de matrícula.
Con nuestra firma usted obtiene:
- Visión estratégica para diseñar el proyecto educativo (modalidad, público objetivo, diferenciadores) alineado con su visión empresarial.
- Asesoría integral en la constitución jurídica, licenciamiento y permisos ante la Dirección Regional de Educación o la entidad competente en su región.
- Acompañamiento técnico-legal en infraestructura, cumplimiento de normativas de seguridad, accesibilidad y equipamiento, para evitar observaciones o rechazo de expedientes.
- Gestión de los tiempos, integración de los distintos actores (municipalidad, DRE, servicios públicos) para que su institución comience operaciones en el menor plazo posible, capturando la demanda que ya existe.
- Asesoría en la estructuración de contratos, pensiones, políticas de admisión, tratamiento de datos, transformación digital educativa, que le permitirá diferenciarse en el mercado.
Conclusión
La educación privada en el Perú es un mercado con demanda real, creciente y estructural. Las familias están dispuestas a invertir, a veces un porcentaje significativo de su presupuesto, en colegios o institutos que cumplan con sus expectativas. Pero este potencial solo se realiza si el proyecto educativo se instala de forma estratégica, legalmente sólida y con la capacidad de responder a los retos de calidad, diferenciación y sostenibilidad.
Si usted tiene un proyecto o idea para abrir una nueva institución educativa, no deje que los trámites, permisos o la normativa le frenen. Lo que necesita es acompañamiento especializado, para transformar esa idea en un negocio operativo, autorizado y competitivo, antes de que otros lo hagan.
En Gálvez Monteagudo Abogados estamos listos para acompañarle en cada paso del camino, porque abrir una institución educativa no es solo un trámite administrativo ni un negocio más: es apostar por la herramienta más poderosa de transformación social, desarrollo humano y progreso sostenible.
Hacer realidad su proyecto educativo significa invertir en el futuro del país, formar nuevas generaciones y dejar una huella que trasciende. Permítanos ser su aliado estratégico para convertir esa visión en una institución sólida, autorizada y exitosa.