El Poder Judicial del Perú ha implementado una medida de protección crucial a favor de Pamela López, esposa del futbolista Christian Cueva, la instalación de un botón de pánico en su teléfono móvil, una herramienta que busca ofrecer una respuesta rápida y efectiva ante cualquier situación de peligro inminente.
¿Qué es el botón de pánico?
El botón de pánico es un servicio judicial de alerta que funciona mediante una aplicación que, al ser activada, alerta de inmediato a la Policía Nacional del Perú y a los juzgados correspondientes, permitiendo una intervención rápida para proteger a la víctima. Desde su implementación, esta herramienta ha sido utilizada en más de 650 casos, demostrando su eficacia en situaciones de emergencia.
En el caso específico de Pamela López la medida fue tomada por el Octavo Juzgado Especializado de Familia de Violencia contra la Mujer e Integrantes del grupo Familiar de la Corte Superior de Justicia de Lima, después de que se presentaran pruebas de violencia determinantes para que el Poder Judicial ordenara su protección. Además de la instalación del botón de pánico, se han adoptado otras medidas, como la restricción de acercamiento por parte de Christian Cueva, con el objetivo de salvaguardar la integridad física y psicológica de López.
¿Quiénes tienen acceso al botón de pánico?
El botón de pánico no está disponible para cualquier persona; su uso es exclusivo para aquellas mujeres que han denunciado situaciones de violencia o que se encuentran en riesgo evidente. Para acceder a esta medida, es necesario que el caso sea evaluado por un juez, quien determinará la necesidad de implementar esta herramienta como parte de las medidas de protección. Una vez aprobado, la instalación y activación del botón se realizan de manera rápida y gratuita en el dispositivo móvil de la persona en riesgo.
¿Cómo funciona?
El botón de pánico es parte de una plataforma destinada a mujeres en situación de riesgo, diseñada para brindar una respuesta rápida y efectiva en casos de violencia de género. Las usuarias reciben un dispositivo o una aplicación móvil que, al ser activada, envía una señal de alerta a la central de monitoreo más cercana. Allí, operadores especializados contactan de inmediato a la policía y a la persona afectada, permitiendo así una intervención rápida. Además, el sistema permite rastrear la ubicación de la usuaria, facilitando una intervención eficaz por parte de las autoridades.
Esta disposición es parte de un esfuerzo más amplio por parte del sistema judicial peruano para abordar y prevenir la violencia de género, brindando herramientas tecnológicas que refuercen la seguridad de las víctimas. La implementación de este tipo de medidas subraya la importancia de la protección y el apoyo a las personas en situaciones de vulnerabilidad, especialmente en casos de violencia doméstica. Aunque ha ayudado a muchas mujeres, sigue siendo crucial mejorar la difusión de esta y las demás medidas disponibles, para que más personas en riesgo puedan verse beneficiadas.
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